Obrim els ulls

Coses meves… o no.

Fàcil exercici per millorar la salut: Jin Ji Du Li

Dret i quiet sobre una cama, mentre que els teus ulls estan tancats. Això és tot. Fes la prova ara mateix, posat de peu, aixeca una cama, tanca els ulls i tracta de mantenir-te parat en un sol peu.

JinJiDuLi

Si no ets capaç de romandre almenys 10 segons, significa que el teu cos ha degenerat fins al nivell de 60 a 70 anys d’edat, en altres paraules és possible que només tinguis 40 anys d’edat, però el teu cos ha envellit molt més ràpid. De totes maneres segur que penses que pots fer això fàcilment… prova-ho !!! descobriràs que amb els ulls oberts és una cosa però quan tanques els ulls… és una altra història!

No cal que aixequis molt la cama, si els teus òrgans interns estan fora de sincronia, fins i tot aixecant la cama una mica et farà trontollar. Els xinesos han avançat molt en el seu coneixement del cos humà. Va ser molt encoratjador saber que la pràctica freqüent i regular pot ajudar a recuperar el teu sentit de l’equilibri. De fet, els especialistes xinesos suggereixen que la pràctica diària de Jin Ji Du Li durant 1 minut, ajuda a prevenir la demència senil.

Pots començar tancant una mica els ulls, en lloc de tancar-los completament al practicar Jin Ji Du Li, de fet això és el que l’especialista en salut Zhong Li Ba Ren recomana.
La pràctica diària de Jin Ji Du Li, pot ajudar en la curació de moltes malalties com:
  • La hipertensió
  • Alts nivells de sucre en la sang o diabetis
  • El coll i les malalties de la columna vertebral
  • També pot evitar que pateixis de demència senil.
A mesura que adquireixis la capacitat de romandre per més temps, la sensació de pesadesa desapareix.
Al practicar Jin Ji Du Li experimentaràs:
  • Que la qualitat del son millora
  • La ment s’aclareix i millora significativament la memòria
Bé… tot això és el que diuen els xinesos i jo crec que practicar 1 minut en cada cama cada dia tampoc es tant !!!.

28 Mai 2013 Posted by | Curiositats, General, Obrim els ulls, Salut, Training Mental | Deixa un comentari

Optimisme i ilusió

Amb la que està queien no puc deixar de recomanar aquest Vídeo; dura 1hora 49 minuts però et puc assegurar que se’t farà curt, i a més estic segur que provocarà un canvi radical en la teva manera de veure la vida.

Optimismo y Ilusión (Emilio Duró)

17 Juny 2012 Posted by | Emprenedors, Empresa, General, Obrim els ulls, Salut, Training Mental | Deixa un comentari

El problema

El Gran Maestro y el Guardián se dividían la administración de un Monasterio Zen.

Cierto día, el Guardián murió y fue preciso reemplazarlo.

El Gran Maestro reunió a todos los discípulos para escoger quién tendría la honra de trabajar directamente a su lado.
Voy a presentarles un problema, dijo el Gran Maestro, y aquél que lo resuelva primero, será el nuevo guardián del Templo.

Terminado su corto discurso, colocó un banquillo en el centro de la sala; encima estaba un florero de porcelana carísimo, con una rosa roja que lo decoraba.

Éste es el problema, dice el Gran Maestro; – resuélvanlo -.

Los discípulos contemplaron perplejos el “problema”, por lo que miraban los diseños sofisticados y raros de la porcelana, la frescura y la elegancia de la flor.

¿Qué representaba aquello? ¿Qué hacer? ¿Cuál sería el enigma?

Pasó el tiempo sin que nadie atinase a hacer nada salvo contemplar el “problema”, hasta que uno de los discípulos se levantó, miró al Maestro y a los alumnos, caminó resueltamente hasta el florero y lo tiró al suelo, destruyéndolo.

– ¡Al fin alguien que lo hizo! – exclamó el Gran Maestro – ¡Empezaba a dudar de la formación que les hemos dado en todos estos años!. Usted es el nuevo guardián.

Al volver a su lugar el alumno, el Gran Maestro explicó:
– Yo fui bien claro: dije que ustedes estaban delante de un “problema”. No importa cuán bello y fascinante sea un problema, tiene que ser eliminado.

Un problema es un problema; puede ser un florero de porcelana muy caro, un lindo amor que ya no tiene sentido, un camino que precisa ser abandonado, por más que insistimos en recorrerlo porque nos trae confort… “Sólo existe una manera de lidiar con un problema”: atacándolo de frente…

¡No huyas de él… acaba con él!.

20 Mai 2006 Posted by | Empresa, Obrim els ulls, Training Mental | Deixa un comentari

Disminución del efecto TV

Nuestras sociedades actuales se caracterizan por imprimirle ritmo ultrarrápido a todo. Nada se toma el tiempo necesario sino que se pretende abarcar lo máximo posible en el menor tiempo disponible.

El descuido mayor hacia esta situación generalizada ocurre con el entretenimiento hogareño preferido: la televisión. En una columna de no más de 5 minutos se suele despachar cualquier tema, sea banal o de la mayor importancia. Ni siquiera los canales dedicados a la cultura y el conocimiento pueden cambiar esta política de rápido y superficial trato de los temas. Por otra parte, la televisión es verdaderamente adictiva y perjudica gradualmente tu capacidad de concentración, no importa lo atento/a que estés mirando tus programas favoritos.

Aunque parezca absurdo, es posible incrementar el poder de tu atención con sólo poner en práctica la siguiente recomendación: No mires televisión dos días a la semana. Puedes elegir cuáles días de la semana hacerlo pero una vez elegidos debes ser impecable: en esos días no enciendas el aparato, ni siquiera durante pocos minutos.

Esto tendrá un efecto que claramente percibirás como benéfico.

Fuente: Club de la Efectividad

20 Abril 2006 Posted by | Training Mental | Deixa un comentari

Agua, nieve… y libertad

El desarrollo personal requiere libertad psíquica: nadie puede cambiar, crecer, ni mejorar si no se siente libre. La idea de libertad psíquica, se opone al concepto de determinismo psíquico. Freud mostró que hacíamos cosas por razones que no entendíamos, pero que condicionaban fuertemente nuestro comportamiento. Esas razones se reprimían en el inconsciente y sólo podían entenderse a través de los métodos del psicoanálisis.

Pero, así como la idea de determinismo psíquico es tan útil para explicar ciertas conductas, lo es menos en otros casos. Por ejemplo, quienes estudian las ratas en los laberintos, aunque estadísticamente puedan predecir que los roedores se comportarán de una determinada manera, tal predicción no les dice nada sobre la “rata individual”. En cambio, sí les dice algo acerca de las condiciones del experimento: no hay libertad en un sistema cerrado.

Algunas personas viven sus vidas limitadas por su pasado. Ven el presente de manera restringida, como una repetición del pasado. Estas personas hicieron ciertas presunciones sobre la vida, antes de que pudiesen hacer elecciones racionales ante cada situación. Operan dentro de un sistema cerrado y sin libertad. Como consecuencia, el presente las frustra continuamente.

Para desarrollarnos como personas, debemos ir más allá de las limitaciones y vivir en un sistema abierto. Cuando reconocemos el presente por su singularidad, tanto como por ciertas similitudes con el pasado, experimentamos la libertad psíquica.

Paradójicamente, la libertad psíquica aumenta con el conocimiento de los determinantes psíquicos de la conducta individual. Nos volvemos más libres cuando comprendemos cuán esclavos somos. Cuanto más sabemos acerca de lo que exactamente está influyendo en nuestras conductas, más podemos usar esa información para tomar decisiones.

Cuando esquío, me siento libre. Es una experiencia estimulante. Cuando bajo por la pista, tengo una opción después de otra. A veces, las opciones son forzadas. Por ejemplo, cuando esquío en una pendiente muy pronunciada, la necesidad de decisiones apropiadas se incrementa en forma drástica. Sin embargo, aún puedo escoger no pasar por tal pista.

A pesar de tener ciertas opciones, el rango es limitado. Polvo o hielo restringen mi opción, porque no sé usarlos a mi favor. Ciertos esquiadores, sin embargo, describen con deleite el sentido de ingravidez, o velocidad, que logran al esquiar sobre tales tipos de nieve. Estos esquiadores disfrutan la tensión que se produce al tener límites e intentar ir más allá de ellos. Enceran sus esquíes para ir más rápido y afilan sus bordes para ganar control.

Los buenos esquiadores, como las personas, experimentan la libertad psíquica junto con el reconocimiento de los límites a sus opciones. Cuanto más saben, más opciones tienen para bajar una montaña. Si quieren velocidad, pueden bajar casi en línea recta. Si quieren control, pueden encontrar la manera más segura. Si quieren conocer, pueden probar nuevas áreas o condiciones. La libertad psíquica es experimentar la opción y ser conscientes de los límites de esa opción.

Cuanto más consciente es uno, más libre es.

Aquellos esquiadores que no son conscientes, tienen poco sentido de libertad. Pueden desear escoger una dirección, pero la opción no funciona. Sienten frustración, en lugar de libertad. Para quienes apenas empiezan, los esquíes van en una dirección y ellos en otra, o cada esquí en una dirección opuesta. Se ven continuamente frustrados por la limitación de su conocimiento y los requisitos reales de la pendiente. Pueden intentar esquiar como caminan, transfiriendo viejos modelos para lidiar con la nueva situación, pero se caen porque esa no es la manera de esquiar.

Este artículo no pretende resolver para siempre los problemas de libertad contra determinismo, pero sí se atreve a sugerir que el problema de la libertad -o de la restricción- es a menudo determinado por el punto de vista de cada uno. Cuando se observa desde el punto de vista de un sistema cerrado, los elementos dentro del sistema son restringidos entre sí. Mientras que, cuando se observa desde el punto de vista de uno abierto, los elementos no se condicionan totalmente entre sí.

Tomemos el ejemplo de un esquiador bajando una cuesta. La cuestión puede plantearse como: ¿Cuál es la ruta más rápida para bajar? Evidentemente, la ruta de menor fricción, más pronunciada y más corta, será la ruta más rápida. Esto podría ser considerado un sistema cerrado para el análisis, con variables ya determinadas. Pero hay factores en el esquiador que podrían indicarnos que la ruta escogida podría no ser la más rápida para él (puede necesitar control y la ruta más veloz no ser conveniente a su estabilidad, o la pendiente más pronunciada podría representar un retraso por riesgo de caídas, etc…). El análisis debe entonces abrirse, para incluir las variables del esquiador.

Cuando limitamos el análisis de una situación a las condiciones externas, podemos perder de vista factores importantes que pueden cambiar los resultados. Por lo tanto, debemos encontrar la información de nuestras opciones no solamente en el conocimiento de las condiciones, sino también en el propio conocimiento de nosotros mismos. Sólo cuando estos conocimientos están en armonía, los esquiadores recorren la pista más rápido.

También experimento libertad cuando navego. Moverme a través del agua gracias al poder del viento me llena de satisfacción. No tengo que ir donde el viento me lleva. Puedo navegar “en” el viento, es decir, incluso puedo mover mi barco hacia donde proviene el viento. Al contrario del esquiador, que no puede ir contra la fuerza de gravedad.

Podría comparar el crecimiento psíquico con navegar. Al avanzar en mi desarrollo personal, me doy cuenta del ejercicio de fuerzas del pasado. Puedo continuar avanzando en la dirección que estas fuerzas me empujan, como si sólo pudiese navegar “de popa”. O puedo moverme conscientemente contra las fuerzas de mi pasado hacia nuevas áreas.

Así como el navegante no puede entrar directamente contra el viento, porque la vela pierde su forma, nosotros no podemos ir directamente contra nuestro pasado, pero podemos usarlo para empujarnos hacia una nueva dirección… sólo si somos conscientes de dónde provienen esas influencias. El navegante que no conoce la dirección del viento no va a ninguna parte. De la misma manera, aquellas personas que no son conscientes, no conocen las fuerzas que actúan en su vida; flotan, son empujadas y algunas veces se hunden… Y cuanto más se quedan en el pasado, menos capaces son de vivir en el presente.

Necesitamos ser conscientes de que el presente no es una re-edición del pasado y ver los nuevos aspectos de la situación. Aceptar el presente por lo que es, en lugar de forzarlo hacia estructuras aprendidas en el pasado exige muy buena predisposición.

Finalmente, un navegante necesita un timón para dirigir el barco. El timonel que hace movimientos demasiado violentos, retrasa el barco por la fricción aumentada del agua. Al igual que el timonel, cuando nos movemos suavemente a través de la vida, sin alteraciones violentas en nuestro rumbo, avanzamos con menos conflictos. En parte, la libertad significa llegar dónde queremos y cuándo queremos llegar allí. Muchas personas interpretan de manera diferente la libertad y se encuentran luego en un permanente movimiento caótico, que las inmoviliza.

La libertad es avanzar, usando las fuerzas en nuestras vidas a nuestro favor.
Cuando integramos las fuerzas de nuestro pasado en el presente, el pasado puede trabajar para nosotros en lugar de contra nosotros. Cuando somos conscientes, incluso podemos usar a nuestro favor esas fuerzas que parecen ir contra nosotros!

Fuente: Club de la Efectividad

21 Març 2006 Posted by | General, Training Mental | Deixa un comentari

Enfoque y desaceleración

Intenta estas simples sugerencias para enfocarte y hacer más lentas las cosas. Tu concentración y memoria mejorarán, ganarás amplitud de perspectiva, y serás capaz de pensar más claramente y con menos esfuerzo.

Cuando enfocas tu mente y enlenteces tus acciones de manera controlada cosechas las ventajas de tener menos tensión, y ganas una conciencia más tranquila y conectada con el momento presente. Aquí tienes una serie de recomendaciones que te ayudarán con estos objetivos.

Observar. Nadie puede dejar de pensar completamente; es imposible. ¡Si comienzas a tratar de no pensar, sólo terminarás por pensar en cómo dejar de pensar! Lo que puedes hacer, sin embargo, es retirarte de tus pensamientos y hacerte un mero espectador objetivo.

No seguir. Imaginar tu mente como una pantalla en blanco o un cielo oscuro. Permite que tus pensamientos vengan y vayan, pero resiste el impulso de seguir a cada uno. Tu cerebro reducirá la velocidad finalmente y te sentirás menos presionado.

Contar. Si encuentras que es difícil alejarte de tus pensamientos, trata de contar despacio cuando respiras. Mira a tus pensamientos y trata de resistir y no seguirlos. Enfoca tu atención a la cuenta cada vez que respiras.

Reenfocar. Cuando trabajas y piensas trata de poner toda tu atención en la tarea. Y cada vez que tu mente vaga, vuélvela a la tarea. Mientras sigues reenfocando tu atención, comenzarás a calmar la mente.

Señales. Un indicio de atención fragmentada es el movimiento fragmentado. Por ejemplo, cuando estás en el cine, es fácil notar si los otros alrededor tuyo están totalmente atentos a la película. La gente que resopla y suspira, que mueve sus cabezas para un lado y otro y que se remueven en sus asientos tiene dificultades para concentrarse. La atención absorta va por lo general acompañada de una postura del cuerpo quieta y relajada. Recuerda esto.

Interés. Trata de encontrar el interés a proyectos y eso te ayudará a concentrarte. Incorporar una nueva afición puede ser una ayuda tremenda. También deberías tratar de encontrar algo interesante hasta en las tareas más aburridas. Si estás en una reunión, acércate a alguien y comienza una conversación. Ponte inquisitivo y podrías descubrir que tienes intereses similares a la otra persona.

Apertura mental. La mente necesita desafíos nuevos y absorbentes para renovarse. Nota algo nuevo en el camino a casa que no habías notado antes. Compra una revista acerca de un tema que normalmente no mirarías, léela. Se trata de abrirse a nuevas posibilidades.

Fuente: http://www.mentat.com.ar

21 Març 2006 Posted by | Obrim els ulls, Training Mental | Deixa un comentari

Primero->Entender

Usted está leyendo este artículo que hemos escrito. Leer y escribir son formas de comunicarse. También lo son hablar y escuchar. Estas cuatro, son las formas básicas de comunicación. Dedicamos a la comunicación la mayor parte de nuestras horas de vigilia. Pasamos años aprendiendo a leer y escribir; años aprendiendo a hablar… ¿pero a escuchar?
¿Qué entrenamiento -o educación- nos permite escuchar de tal modo que comprendamos (real y profundamente) a otro ser humano, en los términos de su propio marco de referencia individual?

Son relativamente pocas las personas que han tenido algún entrenamiento en la escucha. Si usted quiere interactuar efectivamente con otra persona (su conyuge; su hijo; su vecino; su jefe; su colaborador; su amigo, etc.), lo primero que necesita es comprenderla. Y para hacerlo no basta con una “técnica”. Si la otra persona siente que usted está empleando alguna técnica, percibirá duplicidad y manipulación. Se preguntará por qué lo hace, cuáles son sus motivos, y no se sentirá lo bastante segura como para abrirse.

La clave está en su carácter. Su carácter está constantemente “irradiando” y comunicando, con algo mucho más fuerte que las palabras: sus acciones, su ejemplo. Es su carácter quien -en definitiva- hace que las personas confíen o desconfíen de usted. De modo que, si quiere ser realmente efectivo en la comunicación interpersonal, la técnica no habrá de bastarle. Tiene que desarrollar una capacidad, basada en el carácter, que suscita apertura y confianza: la escucha empática.

Podríamos explicar la escucha empática diciendo: “Procure primero entender”. La mayor parte de las personas no escucha con intención de entender, sino de contestar. ¿Por qué no comienza a practicar este tipo de comunicación? Cuando responda una pregunta (o cuando realice algún comentario, sugerencia, etc…), trate primero de entender a la otra persona. Revise lo que ella intentó decirle. No responda, hasta asegurarse de haber comprendido lo que le ha querido decir. Siga intentando comprenderla… y recién entonces conteste.

La comprensión es fundamental: si uno empieza por juzgar, nunca podrá comprender. Procurar primero entender es un principio correcto y perfectamente aplicable en todas las áreas de la vida, pero su mayor poder se pone de manifiesto en las relaciones inter-personales.

Trabajando sobre nuestra propia persona, podemos mejorar nuestra manera de comunicarnos. Son los cambios profundos en nuestro “ser”, los que transforman nuestras acciones, generan confianza… y mejoran nuestras relaciones, actuales y futuras.

Mucho más que una técnica!.

Fuente: Club de la Efectividad

20 febrer 2006 Posted by | Empresa, Training Mental | Deixa un comentari

Conexión

Todos tenemos clara conciencia de que el contacto real con el tiempo presente es escaso y discontinuo a lo largo de cada día. Cuanto peor sea la condición en la que nos hallemos, más efímeros son los momentos de buena sintonía y por espacios más dilatados. Esto es prácticamente un reflejo de nuestra capacidad de prestar atención.

El estar fuera de contacto con el tiempo presente es estar divagando en nuestros pensamientos, en el pasado o en el futuro. El estar bien sintonizado con el tiempo presente consiste en estar aquí y ahora, conscientes del entorno y de nosotros, pero sin extraviarnos con la atención.

Una de las actividades que ayuda a aumentar el contacto consciente con el tiempo actual y nuestra situación consiste en expandir imaginativamente las sensaciones de contacto físico de nuestros dedos con objetos que están fuera de alcance y que de estar al alcance no podríamos contactar de tal manera. Esto sólo es aplicable a objetos que estén en nuestro entorno, pueden ser edificios, automóviles, trenes, postes de luz o señalización, árboles, carteles, etcétera. La idea es mirar al objeto e imaginarnos que pasamos nuestros dedos por su superficie y tenemos las sensaciones táctiles correspondientes aunque imposibles. Por ejemplo: suponiendo que estamos en la calle imaginamos que pasamos nuestra mano por el frente del edificio de oficinas de 20 pisos que tenemos enfrente y sentimos la sensación en los dedos del contacto con los balcones, los vidrios de las ventanas, etc.

Fuente: http://www.mentat.com.ar

20 gener 2006 Posted by | Training Mental | Deixa un comentari

Las leyes de la vida

Existe una tendencia por parte de las personas de asignar a causas desconocidas e incontrolables el origen del éxito y del fracaso. De esta manera dejan librada su vida al azar, sin comprender que así pierden la oportunidad de construirse una existencia plena de posibilidades.

Mucho tiene que ver con esta actitud la educación que se nos imparte desde niños. Se nos enseña que la única manera de obtener logros está basado en el esfuerzo y en el sacrificio personal.

Pero la realidad indica que no son las personas que más se esfuerzan y sacrifican las que mejores resultados consiguen. La verdad es que los seres humanos tenemos el poder de crearnos las circunstancias que deseamos.

Se trata de un poder totalmente natural con el cual todos nacemos, que responde a Leyes Naturales perfectamente identificables y que por así decirlo, se alojan en nuestra mente subconsciente.

Ocurre que sólo una pequeña minoría conoce este poder innato, el resto lo desconoce totalmente y sin saberlo, transcurre su vida creándose situaciones que dependen de su actitud mental.

Este desconocimiento hace que las personas vivan en la incertidumbre permanente, con miedo y llevando una vida de escasez, cuando la abundancia debería ser la regla y no la excepción. El gran éxito de ventas que tienen los llamados libros de autoayuda, indica que existe una necesidad de encontrar respuestas.

Salvo contadas excepciones, este género de libros es poco lo que aporta, ya que no enseñan cuáles son las verdaderas y profundas causas que permiten obtener logros y abundancia.

La prosperidad, el mantenimiento de la buena salud y la realización personal en el plano afectivo, se obtienen a partir del conocimiento de cómo operan las Leyes Naturales de cumplimiento inexorable y que gobiernan todas las realizaciones de las personas.

Las cuatro Leyes fundamentales son:

1. La Ley de Causa y Efecto, que estipula que “a iguales causas, iguales efectos”. Según esta Ley, sólo es necesario reproducir las causas del éxito para obtenerlo.

2. La Ley de Atracción, mediante la cual atraemos hacia nosotros aquello sobre lo que fijamos nuestra atención e interés. Esto puede ser favorable o desfavorable, según nuestro interés esté guiado por el deseo o el miedo.

3. La Ley de la Vibración, que al contrario de lo que ocurre en la física, estipula que los polos iguales se atraen y los opuestos se repelen.

4. La Ley de la Compensación, que estipula que recibimos aquello que damos. En otras palabras, debemos dar para poder recibir.

El significado de estas Leyes puede parecer oscuro en un principio, pero a medida que se las estudia, su funcionamiento es fácilmente comprensible.

Sabiendo cómo operan, podemos ponerlas a trabajar en nuestro beneficio. Si no sabemos cómo operan, igual harán sentir sus efectos, pero estarán fuera de nuestro control.

La llave maestra para controlar la operación de estas cuatro Leyes fundamentales está en nuestra mente subconsciente. Todas las herramientas para lograr esto, los seres humanos ya las tenemos desde nuestro nacimiento.

Resumiendo, es perfectamente factible para todos nosotros, erradicar la incertidumbre de nuestras vidas, controlando conscientemente las causas del éxito o fracaso. Así, es posible diseñar nuestra existencia en función de nuestros deseos.

20 Desembre 2005 Posted by | Empresa, Obrim els ulls, Training Mental | 5 comentaris

Contención intelectual

Habitualmente se puede comprobar que las personas no tienen deseos de que les enseñen que están equivocadas o que ignoran algo; dolorosamente esto nos suele ocurrir con la gente más cercana.

Por duro que suene, a menos que seamos una persona de mucho renombre nuestros allegados no siempre estarán bien dispuestos a aprender algo de nosotros. A pesar de ello no debemos abrumarnos. Las cosas caen bien por su propio peso.

Pocas situaciones como las mencionadas mejoran a quienes intervienen en ellas, pues no suelen ser otra cosa que una resistencia y un prolongado intento de superarla. Con esto en mente, para obtener mejores resultados en las situaciones en las que deseas enseñar o corregir pero obtienes resistencias, intenta seguir estas recomendaciones:

Ten siempre presente a las personas que a lo largo de tu vida te han aportado conocimiento o te han ayudado con una corrección oportuna. Intenta seguir el modelo de su actitud.

Asegúrate objetivamente de tener la razón o la solución. Luego plantea tus ideas tranquilamente, sabiendo lo que dices y de forma organizada.

Si al final convences a alguien de entrar en razón, corregir su error, o aplicar la solución, bien. Si no, el problema ya no es tuyo, sino del otro.

Estas situaciones son sutilmente difíciles. Sólo es posible obtener un beneficio en tales situaciones si nos hacemos responsables por obtenerlo. Recuerda esto: casi siempre hay algo bueno en hablar con otra persona, aunque no variemos nuestro punto de vista. Como mínimo, veremos las consecuencias que tiene la falta de conocimiento y el rendirse a la mentalidad subjetiva. Una mentalidad subjetiva oponiéndose a nuestra corrección o razón nos permite comprobar hasta qué punto esa subjetividad y/o ignorancia destruye las posibilidades de la evolución intelectual.

La no comunicación sigue la tendencia del error. La comunicación favorece la de la solución. Es más caótica la no comunicación exitosa que la comunicación sin éxito. Siempre será mejor comunicar que callar.

Fuente: http://www.mentat.com.ar

20 Desembre 2005 Posted by | Training Mental | Deixa un comentari